12.09.2025   |   Schwarzenberg   |   Suiza

"El monte Pilatus, un lugar cargado de historias míticas, se alza sobre Lucerna", dice un anuncio suizo sobre la emblemática montaña de Schwarzenberg. En la hondonada de esta pequeña comunidad se encuentra el taller de carpintería Vogel. No produce leyendas, sino obras atemporales en madera... con las máquinas de HOMAG.

El taller de carpintería Vogel tuvo un comienzo modesto. Fundada hace más de 25 años, la empresa familiar crece constantemente: más empleados, más superficie, más pedidos. El equipo, inicialmente compuesto por cuatro miembros, hoy cuenta con cerca de cincuenta personas bajo la dirección del propietario y gerente Markus Vogel con su esposa. La idílica y agreste zona se refleja en el amor de esta empresa de Schwarzenberg por la naturaleza y la madera como material. Para su mecanizado no solo cuentan las habilidades de los empleados, sino también las máquinas y el software. Sus principales productos son cocinas, puertas y armarios, además de muebles, obras de interior, ventanas, escaleras, suelos y muchos otros. El objetivo principal: calidad y utilidad. Esto conlleva clientes satisfechos, en su mayoría de los alrededores de Lucerna. Pero el desarrollo tiene consecuencias: "No habíamos planeado crecer tanto", comenta Vogel.

La evolución sigue su curso

El crecimiento exige un cambio de mentalidad, tanto técnica como en cuestiones de espacio. Por esta razón, en 2012 Vogel adquirió un inmueble mayor en el pueblo. En la nueva sede de la empresa en Kapelmatt se creó un taller con mayor nivel de automatización y el objetivo de mantener siempre actualizado el software y las máquinas. Pero unos diez años después, la empresa volvía a estar desbordada. ¿Traslado? No era una opción. Así pues, el taller y el almacén debían redistribuirse. La solución: una potente sierra de tableros y un almacén horizontal en un segundo nivel. Para ello se necesitaba un socio que conociera las condiciones locales, ofreciera tecnología moderna y resolviese rápidamente los problemas. Uno que fuera fiable tanto antes como después de la compra de la máquina. "Nuestros clientes esperan, con razón, una implementación fiable de su pedido", aclara el jefe de la empresa. "Yo también lo espero de mis socios: comunicación directa, trayectos cortos, nada de rodeos."

De Poncio a Pilato

...Pero no en HOMAG. Los trayectos son cortos y la comunicación es tan buena como las máquinas e instalaciones de Holzbronn. Esto refleja la esencia del taller de carpintería a los pies del macizo. La colaboración entre ambos dura ya mucho tiempo y esta empresa de Schwarzenberg ya utiliza varias máquinas de HOMAG. Son tan fiables como su servicio de atención al cliente. Así pues, Vogel sabía con quién podía implementar sus planes de reforma. Al fin y al cabo, había muchos puntos a considerar.

El almacén cobra altura

La elección recayó en la sierra de tableros SAWTEQ S-300 y el almacén horizontal STORETEQ P-310. Sin embargo, como el espacio estaba ocupado, el núcleo de la producción se trasladó del centro a la periferia y el almacén se construyó en altura. La sierra se situó donde antes estaba el almacén, y este paso a ubicarse bajo el tejado de techos inclinados. Para proteger a los empleados se instaló un cercado elevable. HOMAG implementó todo esto y, por tanto, probablemente el primer almacén horizontal de Suiza que no se encuentra al mismo nivel que el taller. "Tras un breve periodo de adaptación, el travesaño funciona de forma rápida, segura y fiable", afirma Vogel.

El corte de tableros no es un fenómeno marginal

Desde entonces, apenas hay tiempos de espera en la empresa Vogel. De ello se encarga el sistema de almacenamiento inteligente con 16 puestos, de los cuales dos pueden llenarse desde el suelo hasta el nivel inferior. El avance y la clasificación son rápidos y están bien pensados. "Siempre sabemos lo que hay en el almacén. Después de una semana y media, todo funcionaba ya perfectamente". Sobre todo impresiona el reciclado de los tableros restantes: "Producimos cosas nuevas a partir de restos". La inversión y la reestructuración han valido la pena con creces: la producción es más rápida y el trabajo más agradable. Y también los empleados perciben la tranquilidad del taller desde que ya no circulan a todas horas carretillas elevadoras por las estrechas naves. "Con la combinación de sierra y almacén, la producción es más uniforme, tranquila y precisa. Aunque los pedidos se procesan con rapidez, el ambiente rara vez es agitado". Es cierto que la sierra seccionadora de tableros con control ERP se ha relegado a la periferia. Pero no por ello es una pieza decorativa sin importancia. Con características como el paquete del escáneres, el módulo de apilamiento y la impresora de prensor, ofrece un inicio asequible en el corte de tableros totalmente automático. Y precisa un solo operario.

Nesting versátil y cantos precisos

El centro de mecanizado de pórticos compacto CNC CENTATEQ N-500 mecaniza y corta tableros generando pocos retales. Vogel utiliza la máquina para las aplicaciones clásicas del nesting: para crear muebles o para dividir y refinar frentes de muebles de cocina. Con la manipulación automatizada de materiales, ahorra tiempo y hace el trabajo en la máquina más eficaz. Dos servoaccionamientos digitales sincronizados en sentido X aseguran la calidad de mecanizado; el sistema de cambio de herramienta dispone de varios puestos. Además, el Centateq con su equipamiento de serie es eficiente desde el punto de vista energético, gracias a su alta potencia de vacío con un bajo consumo de corriente. Mientras tanto, una EDGETEQ S-500 ProfiLine proporciona cantos encolados de forma precisa. El avance seleccionable se adapta a la productividad, lo que constituye una solución adecuada para empresas que, como Vogel, tienen necesidades de rendimiento variables. "Ahorramos mucho tiempo con el retorno y tenemos menos enlucido". Posibilidad personalizada adicional: automatización y ampliación de las funciones de esta robusta serie.

Una colaboración acreditada

Vogel aprecia en HOMAG su gama y la calidad de sus máquinas adaptadas entre sí. Otro punto a favor: el servicio in situ en Suiza. "El resultado es adecuado y la colaboración nos ha unido aún más", comenta. "Con las máquinas e instalaciones de HOMAG nos acercamos cada vez más a nuestro objetivo: llegar a ser tan rápidos como una fábrica con producción en serie, pero seguir siendo un taller de carpintería con verdaderos carpinteros". Y, en caso de duda, siempre hay disponible un especialista de HOMAG con una solución práctica para cada problema. Ya se ha encargado un segundo CNC.