La historia de Gebr. Schütt KG, una empresa especializada en la construcción de estructuras especiales, es una historia de superación. La familia Schütt la fundó hace más de 130 años como taller de carpintería, en los años 60 implantó la producción de madera laminada y, en las décadas sucesivas, siguió desarrollando el negocio hasta convertirlo en una empresa de construcción que opera en todo el país y que cuenta con su propio estudio de arquitectura e ingeniería. En la actualidad, la empresa se está iniciando en el ámbito de la fabricación industrial. Para ello, apuesta por sus empleados y se vale de los servicios de SCHULER Consulting. Tillmann Schütt, director ejecutivo perteneciente a la quinta generación al frente, y Michael Postulart, asesor en SCHULER Consulting, nos hablan de pequeños logros y grandes cambios, y del importante papel que desempeñan los trabajadores a la hora de hacerlos realidad.
Entrevista realizada por el Dr. Stefan Bockel (departamento de gestión de productos de WEINMANN) en la WEINMANN Treff 2022.
Señor Schütt, su empresa está dando el salto de taller de carpintería de gran envergadura a la producción industrial. ¿Qué le llevo a colaborar con SCHULER Consulting en este proceso?
Tillmann Schütt (TS): En nuestra empresa, contamos con empleados que llevan muchos años trabajando con nosotros, muchos de ellos más de 25 o 30 años, e incluso cuyos padres ya han formado parte de la plantilla. Yo mismo soy director ejecutivo y pertenezco a la quinta generación al frente de la empresa. Ahora queremos dar el paso a la fabricación industrial e ir en contra de las costumbres, de las cosas que "siempre se han hecho así". La envergadura de nuestros proyectos es cada vez mayor y necesitamos agilizar la producción para hacer frente a este crecimiento. Me percaté de que estábamos avanzando muy despacio con los recursos de los que disponíamos y llevaba tiempo dándole vueltas a la idea de buscar ayuda externa. En 2021, nuestro jefe de producción acudió a la WEINMANN Treff, donde entró en contacto con SCHULER Consulting, y regresó muy impresionado, lo que me llevó a decantarme por la empresa.
Señor Postulart, su proyecto con la empresa Schütt consiste en agilizar los procesos de producción y aumentar así la productividad de la empresa. ¿Cómo comenzó el proyecto?
Michael Postulart (MP): En nuestra primera conversación, comentamos que el rendimiento de su nueva instalación no era el deseado. Schütt dispone de una instalación de 4 mesas con un puente WALLTEQ y un dispositivo semiautomático de aislamiento insuflado, así que decidimos presentarnos en el taller y poner en marcha un proyecto con un enfoque "Lean". Acudí con un pequeño equipo de SCHULER para investigar por qué la máquina pasaba tanto tiempo parada. Primero, nos ofrecieron una visión general de la producción de madera laminada y la construcción de marcos de madera; después, analizamos la producción de marcos de madera y realizamos un muestreo de trabajo. Utilizamos diagramas de espagueti para analizar los recorridos de los empleados durante la producción y descubrimos que se apartaban de la máquina para realizar bastantes trayectos "innecesarios", por ejemplo, para ir a buscar una herramienta. Reducir los desplazamientos de los empleados fue el primer paso para conseguir mejorar la productividad a corto plazo. El señor Schütt quedó satisfecho con nuestro trabajo, por lo que posteriormente elaboramos un catálogo de medidas de mejora aplicables a toda la producción, que estamos implementando poco a poco.
Señor Schütt, aún es necesario introducir algunos cambios en los procesos de producción. ¿Cuál ha sido la reacción de sus empleados? ¿De qué manera se involucra con su equipo en su implementación?
TS: Los empleados son increíblemente trabajadores y nuestras exigencias son muy altas, pero no podemos pasarnos. Hay un punto en el que es necesario implementar cambios para evitar sobrecargar al personal. Lo que debemos evitar es involucrar a una parte externa en la producción sin informarles de ello. Es necesario que participen en el proceso y debemos comunicarles de quién se trata y qué está sucediendo. De lo contrario, aumentaría su desconfianza y podría preocuparles que su puesto de trabajo peligrase. Sin embargo, Postulart y nuestro equipo encajan bien: se entiende con nuestros trabajadores, los anima a participar en el cambio y los involucra en el proceso. Así es como hay que hacer las cosas. Es importante tener en cuenta las ideas y ponerlas en práctica, y es lo que hacemos en todo el proceso de trabajo. No estamos hablando de aspectos muy complejos, pero a menudo se pasan por alto. Contar con ayuda externa nos hace comprometernos a tomar acción y fijarnos unos tiempos.
Señor Postulart, ¿cuál es su enfoque exacto a la hora de hacer partícipes a los trabajadores?
MP: La industrialización del trabajo manual requiere un cambio de mentalidad y para ello es necesario aceptar y comprender cómo funciona una producción ágil. Como comenta el señor Schütt, es muy importante hacer partícipes a los trabajadores y celebrar juntos los pequeños logros. Básicamente, formulamos una pregunta muy simple: "¿Qué podemos hacer para simplificar el trabajo diario?". Para responder a esta pregunta, organizamos un taller y pusimos en práctica el resultado inmediatamente. La respuesta fue la implementación de una estación de retestado móvil con la que ahora se puede trabajar de forma más flexible en la producción. Para mí es importante que todos entiendan que es posible conseguirlo si se involucran. Empezamos poniendo en práctica una idea sencilla que nos ayudó a conseguir juntos un logro pequeño, pero importante.
¿Qué "pequeños logros" han alcanzado ya en este proceso de adopción de una producción industrial y cuál es el siguiente en la lista?
TS: Una de las primeras mejoras de la producción fue la implementación de un almacén de montantes. Antes, apuntalábamos las paredes de forma más o menos provisional, pero ahora contamos con un lugar centralizado para realizar los pasos de mecanizado posteriores y podemos terminar las fachadas e instalar las ventanas.
MP: El almacén de montantes es una instalación de fabricación propia de Schütt y nos ha permitido optimizar el flujo de material antes de la carga. Uno de los objetivos del proyecto es optimizar el flujo general de material en la producción, el uso de los espacios de almacenamiento y la logística en su totalidad.
¿Qué posibilidades de optimización hay en cuanto a la logística?
TS: En los últimos dos años, los fallos en la cadena de suministro han condicionado el trabajo. Hemos adquirido una gran cantidad de material y, para ser sinceros, hemos desaprovechado nuestra mejor nave para utilizarla como almacén. Ahora queremos cambiarlo, porque que nuestro personal pasa demasiado tiempo yendo a buscar el material. Nos gustaría mejorar todo el tema de la logística a largo plazo y contratar a un profesional de logística. En cuanto al futuro inmediato, podemos empezar a utilizar herramientas adicionales para reducir el número de trayectos que realizamos y el tiempo que conllevan, ya que sale más rentable que hacer que los trabajadores se desplacen constantemente.
MP: Se podría designar a un empleado que se ocupe de la logística y que lleve a cabo los desplazamientos del material para no tener que pedir ayuda a un compañero que se encuentre en la estación de armazón para descargar un camión ni tener que transportar manualmente una pieza hasta la estación de retestado. Primero, nos ocupamos de las cuestiones menores como estas, que optimizan el flujo de material y el aprovechamiento de los espacios de almacenamiento y, posteriormente, atendemos las cuestiones estratégicas más importantes.
TS: El trabajo junto a SCHULER está bien definido, avanzamos con buen ritmo y sin perder de vista nuestros objetivos, y queremos seguir colaborando a largo plazo. Queremos ampliar aún más este proyecto e implementar los mismos procesos en la nave de encolado. Ya tenemos prevista una reforma y, después, adaptaremos la logística del almacén.
Señor Schütt, la optimización de la producción es solo una parte de los diversos cambios que su empresa tiene por delante. ¿Cómo se las arregla para estar al tanto de estos temas?
TS: Trabajo en diversas asociaciones y participo en foros de construcción en madera, así que estoy bien informado sobre lo que ocurre en el sector, pero mis empleados no tienen por qué conocer esta información. Es muy importante transmitirles mis ideas sobre el crecimiento de la empresa y la evolución del mercado. Por eso, hace dos años fijamos unos objetivos para toda la empresa y creamos un puesto específico en nuestra oficina de gestión de proyectos para seguir el proceso, que afecta a toda la empresa. Contamos con varios grupos de trabajo repartidos en módulos que se reúnen cada 14 días. Además, cada 3 meses, realizamos un análisis exhaustivo de los resultados, que luego compartimos regularmente con todos los empleados para que todo el mundo esté informado en todo momento de lo que ocurre en la empresa.
¿Qué recomendaría a otros compañeros del sector que también quieran industrializar su empresa?
TS: En primer lugar, le recomiendo a cualquier persona que quiera automatizar su producción que acuda a SCHULER sin pensárselo dos veces. Cuanto mejor definida esté la tarea, mejor se podrá planificar su producción. Si echo la vista atrás, es evidente que no teníamos una imagen clara de nuestro producto. Nosotros no trabajamos con casas unifamiliares, así que no podemos saber si hoy estamos produciendo 80 casas y mañana llegaremos a las 120 o 150, sino que trabajamos con plantas de diferentes alturas, pero así es el mundo de las estructuras especiales. Tampoco teníamos claro con qué finalidad utilizar nuestra instalación de WEINMANN. Primero adquirimos la instalación y luego pedimos asesoramiento, y eso podría haberse abordado de otra manera. Además, el asesoramiento que recibimos por parte de SCHULER gracias al análisis exhaustivo de la empresa es fantástico, y está dirigido a cualquier persona que quiera replantearse su modelo de negocio. Con su servicio de asesoramiento, el precio está acordado desde un principio y ofrecen una amplia gama de soluciones. Recomiendo sin duda alguna este seguimiento externo para seguir implementando la industrialización.
