Presentación del empleado Mr. LIGNA
Después de 32 años de duro trabajo como director del centro de formación, el año pasado Wolfgang Mutschler se jubiló.
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Después de 32 años de duro trabajo como director del centro de formación, el año pasado Wolfgang Mutschler se jubiló
Después de 32 años de duro trabajo como director del centro de formación, el año pasado Wolfgang Mutschler se jubiló. Pero, ¿qué ha tenido de especial su vida profesional en HOMAG? Las respuestas a estas 5 preguntas nos lo aclaran:
¿Cuál fue su primer puesto en HOMAG?
El 1 de enero de 1988 empecé en HOMAG como director del centro de formación de atención al cliente y me he mantenido en el mismo puesto hasta el final. Entonces éramos tres: dos formadores y yo. Poco a poco pude aumentar el equipo de formación con compañeros de los departamentos de producción y pruebas. En 1994 empecé a hacerme cargo de la documentación técnica y en 2000 también me responsabilicé de la gestión con idiomas extranjeros.
¿Nos puede contar uno de sus mayores desafíos?
Al principio me resultó difícil llegar a un acuerdo con el departamento de ventas. La formación es importante y los servicios son costosos, por lo que también hay que invertir dinero en ellos. Si el departamento de ventas negocia durante dos horas sobre una máquina, la formación de los operadores de esa máquina también debería ser objeto de debate durante al menos dos minutos. Al fin y al cabo, lo principal es la satisfacción de nuestros clientes, que deben poder trabajar rápida y adecuadamente con nuestras máquinas.
Otro desafío importante fue la generación automática y, sobre todo, específica para cada cliente de la documentación de la máquina. Gracias a esta documentación ofrecemos valor añadido a nuestros clientes y les formamos para que sepan utilizar los grupos y las opciones de software de sus máquinas.
Si echa la vista atrás, ¿recuerda alguna historia divertida de sus años en HOMAG?
Ha habido muchos momentos divertidos, pero hay una historia que recuerdo especialmente. El Día del Padre, los empleados visitaron la feria LIGNA en Hannover. Tras finalizar la feria, se realizó una demostración privada de una PowerLine de una celda con ciclo. Los encargados de esta demostración quisieron hacer algo especial. La demostración transcurrió con normalidad: se encolaron el primer canto, el segundo y el tercero... pero en la última pasada empezaron a aparecer cajas de cerveza llenas sobre las piezas para todos los empleados. Todos nos sorprendimos mucho. Para que dejaran de salir cajas de cerveza, concluí la presentación pulsando el botón de parada de emergencia y diciendo: "HOMAG no solo es una empresa creativa en el desarrollo de maquinaria, sino que también ofrece piezas, digamos, muy originales".
¿De dónde viene el apodo Mr. LIGNA?
Bueno, el primero en llamarme así fue el señor Hamm cuando me otorgaron la insignia de honor de diamante del HOMAG Group. Ni siquiera yo mismo sabía cuánto orgullo me infundiría este nombre,
ya que ese título correspondía realmente a Thomas Storz. Para mí, él es el auténtico Mr. LIGNA. Él fue el verdadero impulsor de los espectáculos técnicos. Yo solo era la cara que aparecía bajo los focos en la feria. Al hacerlo, me convertí en la persona a la que el público conocía, mientras él se entregaba en cuerpo y alma para que la escena fuese perfecta, lo que me motivaba para todas las actividades de la LIGNA y, por supuesto, para los espectáculos, cuyo éxito solo era posible gracias a la enorme capacidad de improvisación del equipo de presentación. Este trabajo de gran calidad y todas las personas que participaron en él fueron muy importantes para los impactantes shows de HOMAG y causaron un efecto permanente en la empresa y en nuestros clientes.
Estoy orgulloso de este apodo y enormemente agradecido por los focos que me iluminaron.
¿Qué ha sido lo más especial de trabajar en HOMAG?
Claramente, la libertad que me daban los directivos, ya que aumentaba mis ganas de seguir trabajando. También lo fueron mis compañeros de trabajo, a los que siempre recordaré, sin olvidarme de mis superiores, aunque no siempre estuviésemos de acuerdo. Siempre estuvieron a mi lado.
Estoy convencido de que el trabajo de las ferias unió al equipo y a toda la familia HOMAG, a pesar de que también nos causara estrés. En el futuro, este trabajo debería formar parte del todo y considerarse esencial.